Cuando cocinamos, lavamos platos, vamos al súper y lo hacemos, como quien dice, sin pereza y con un buen ritmo, podemos llegar a quemar la mitad de las calorías a que si hubieramos estado corriendo la misma cantidad de tiempo. Yo lo comprobé un domingo en la mañana que me puse el medidor de frecuencia cardiaca(un dispositivo especial que basado en el peso, edad y ritmo cardiaco, mide las calorías utilizadas), me fui para el súper, compré una papaya, flores y el periódico, me regresé a mi casa, acomodé las flores en un jarrón e hice desayuno, todo en 30 minutos y comprobé que gasté 150 calorías, la mitad de las calorías que quemo cuando corro 30 minutos a un ritmo moderado. Los beneficios de hacer ejercicio son incuestionables, pero no son la única manera de mantener un alto gasto de calorías durante el día. La doctora Dayanna Jiménez, Nutricionista especialista, creadora del Centro Sportition, una empresa que desarrolla planes alimenticios personalizados, nos da su parece