Nos elegiste 24/7

 Algo así como el silencio que no se hace sentir ni pide agradecimiento, pero espera constante su momento para ser esencial.

 Ese has sido vos.

 Con esfuerzo mantuviste las bases de nuestra casa, pero más que eso, nos diste una imagen de cabeza de hogar que alimentó la fe en que el bien siempre podría más.

 Nos mantuviste unidos silenciosamente, sedientos del calor de hogar que diseñaste con mi madre, sin ingredientes artificiales, puro trabajo diario, humildad y deseos de superación.

  Te has asegurado de que nada nos falte, pero nunca nos compraste, o endulzaste con halagos, lo tuyo es el respeto y la honestidad.

 Yo creo que para ser como vos primero hay que ser feliz, tu andar por la vida, dependiente de nada, amable con todos, sólo lo consigue quien está en paz con su interior.

 Cuando Dios te eligió como nuestro padre, decidió darnos la fuerza de la concordia, y con los años aprendí que no hay ninguna mayor.

 Yo te celebro todos los días cuando me acuerdo de dónde vengo.

 Nos enseñaste que ser un verdadero hombre y padre, es una decisión de 24/7, 365 días al año.

 Eso resume lo que guardamos en el corazón, el motivo de nuestra admiración, nunca te vimos siendo otra cosa más que nuestro padre. Eso no es tarea fácil, pero lo has hecho con la convicción de quien simplemente no entiende otra opción.

 Hoy entiendo que las opciones las tuviste siempre pero nos elegiste, 24/7.

  Por eso mi corazón y el de mis hermanos es tuyo y junto a vos seremos por siempre tu mejor elección, invencibles en nombre del amor.

 A nuestro roble,

 Familia Ureña Gutiérrez.